Buenas noticias y volvemos al inicio de todo.

Varias semanas, casi un mes, desde que empecé a trabajar tras 7 meses de desempleo con los problemas que todo eso conlleva.

El día 15 del mes pasado comencé a trabajar de nuevo, en lo mío, de encofrador, trabajando todos los sabados, lo que ha hecho que me pierda las pruebas de Treto y Colindres, además de las pruebas de copa de España de Villaralbo, Padrón y Navia.

La próxima cita, y que no me pierdo nada más que por causa mayor, es la carrera en la catedral del ciclocross, la carrera de la copa del mundo en Igorre.

Esta pequeña localidad vizcaina, cercana a Bilbao, ve como cada año, su parque se llena de ciclistas y aficionados que animan desde la primera a la última carrera y a todos sus participantes.

Hace tres años, fui junto a mi amigo Ricardo a ver la carrera y decidí que yo al siguiente tenía que vivir eso entre las cintas, notar el calor de la gente empujando, notar que se siente cuando pasas por debajo del arco de "Uci World Cup", observar como los pros españoles lo dan todo para meterse entre los 30 primeros o que no les doblen, todo eso tuve la oportunidad de vivirlo hace dos años (las fotos son de ese año) y quedé enamorado, tanto del ciclocross como de Igorre.

Este año espero ir y veros a todos participando entre las cintas o detras de ellas.